viernes, 10 de abril de 2020

10 de abril de 2020

     Hoy fue un día importante, hoy es el cumpleaños de mi hermano, así que lo primero que hice nada más levantarme fue llamarlo para felicitarlo. Luego me costó la misma vida arrancar. Cuanto menos hago, menos quiero hacer.

     Ayer fue un día de finales, final del libro y final de serie. Discrepancias con ambas. El libro al final era lo que yo decía. Por cierto que el libro es 'LA ISLA DE ALICE' de Daniel Sánchez Arévalo. Pensaba que toda la investigación que se pasa haciendo a lo largo de todo el libro iba a llevar a otro puerto, pero no vale para nada. Bueno para nada no, para encontrar un perro y salvar a una vecina a la que le da una bajada de azúcar o algo así. Y todo esto sucede al final. Porque todo sucede al final. Con lo cual me pregunto, para que me paso 518 páginas de 616 leyendo y leyendo de como compra cámaras, como las instala, como espía y como deja de espiar, para que al final no valga para nada. Solo una foto, de una cámara que coloca en las primeras páginas. Pérdida de tiempo, paja, relleno, es lo que siento. Creo que ha metido el tema del engaño, por llamarlo de alguna manera, al final para darle más interés, pero no vale para nada. Y los flash que mete del futuro, al final del libro (porque todo sucede al final) no los entiendo para nada.
   
     Para mi el libro es un despropósito, toda la investigación para que acabe así. No sé. Que fuera un asesino y el accidente hubiera sido una venganza. Que el tal Mark tuviera algo que ver y la estuviera engañando. Que hubiera sido por celos de Jonh ya que mete el tema gay (al final del libro). No sé, algo más que la pastelada final. Sobre todo porque claramente en la parte de atrás pone la palabra THRILLER. Y para mi en un thriller, como mínimo, tiene que haber un asesinato. En verdad hay un asesinato, pero de un personaje secundario que nada tiene que ver con la trama. Y no viene ni a cuento. Pero ni a cuento. No sé. Estoy decepcionada la verdad. Otra cosa que no me gusta es que, autores españoles narren sus historias en América o Londres. Ancha es Castilla como para que se vayan fuera. Hoy me he puesto con el otro que tenía empezado, 'TE ESTOY VIENDO' de Clare Mackintosh. Pero mientras lo leo, os dejo otra recomendación, 'EL DESORDEN QUE DEJAS' de Carlos Montero. Este sí que es el libro de libros. Por si a alguien le interesa.

     Respecto a la serie no voy a hacer ningún comentario. No me gustó, a pesar de que las otras me encantaron. Y los mineros asturianos...alguien me lo explica. Esa gente debería de ir a mi pueblo a ver minero de verdad. Porque soy de Asturias, de las Cuencas mineras. Y me hizo mucha gracia verlos la verdad. Ahora no sé cual vamos a ver en conjunto. Hoy, de momento, toca peli. Aunque antes veremos un poco a la doctora Lee. La de los granos.

     A las 8 subimos a la azotea, a tomar el aire y aprovechar la música de los vecinos. Hoy había mucho ambiente. Todo el mundo bailando. Estaban los vecinos del 4, la chica con las gemelas, que había subido con su familia de cobayas. El padre, la madre y los chiquillos. Estuvimos casi una hora arriba. Andrés haciendo deporte. Yo bailando y dando vuelvas. Viendo la puesta de sol. Ojalá poder verla pronto en la playa.7

     Me estoy encontrando frases muy interesantes para aplicarlas hoy en día. Está claro que esta circunstancia que estamos viviendo es excepcional. Como excepcional es el mundo y las circunstancias humanas que nos hacen llegar donde estamos.

La cima de la sabiduría humana es saber conformar el ánimo a las circunstancias y conseguir una calma interior en medio de las peores calamidades - Robinson Crusoe

jueves, 9 de abril de 2020

09 de abril de 2020

     ¿Sabéis lo que es un día poco productivo? Pues eso ha sido hoy. Aunque he disfrutado. Por la mañana estuve scrapeando el álbum para mi Clau, aunque no estoy muy segura de que pueda hacer la comunión este año. Y después de comer sofá y manta. Y mucha lectura.

     He retomado 'LA ISLA DE ALICE' de Daniel Sánchez Arévalo. Lo compré hace dos años, en el aeropuerto. Me iba a Tenerife a ver a mi madre. Fue un viaje maravilloso. Siempre me "olvido" de llevar un libro a los viajes. Así me puedo comprar uno. nunca son suficientes. Al igual que los pintalabios rojos.

     Me enganchó la pelirroja de la portada y la sinopsis de atrás. Lo que fue el libro no tanto. Y lo tenía por la mitad. Lo retomé. Y ya me lo estoy terminando. Llevo leídas 518 páginas. Quinientas dieciocho páginas en las que solo esperaba encontrar un nombre. El nombre del responsable de lo que está pasando. Ese nombre acaba de aparecer. Y claro, una no es el primer libro que se lee, ni la primera serie, ni película. Por lo que la cabeza hace especulaciones. Y esas especulaciones me hacen pensar hacia donde va encaminado el final. Y no me gusta. Así os lo digo. No me gusta. Ojo, que ya sabemos que esto puede cambiar. Pero me da a mi que no, que los tiros van por donde me los imagino. Que cuando el río suena agua lleva. Y no me gusta. Pero ya os contaré si tengo razón. O no.

     Ayer pasaron cosas interesantes después de escribir. Hubo vídeo llamada múltiple, y fue muy divertido. Andrés volvió a hacer bizcochín, aunque no sé que pasa últimamente que los bizcochos nos están troleando y no salen como tienen que salir. Menos mal que el sabor es el de siempre y se deja comer. Vimos dos capítulos más de 'LA CASA DE PAPEL'. Y ya solo quedan dos para que termine. Se dio la vuelta a la tortilla y se está poniendo interesante. Ahora que solo quedan dos capítulos. Hoy la terminaremos, lo más seguro. Mañana quiero ver una película, 'LA CHICA DEL TREN'. Me leí el libro hace un par de veranos y me gustó muchísimo. Y quiero ver la peli.

     Hoy subimos a la azotea a las ocho y algo, a ver quien era el que tenía la música que hace dos días suena. Resulta que estaban las azoteas llenas de gente en ropa de deporte. Y en una de las azoteas una mujer haciendo ejercicio y todos siguiéndola. Mañana subimos. Por aquello de que si no puedes con el enemigo, únete a él.

     El panorama nos deja a mi en el sofá, en la misma posición que ayer escribiendo. Andrés en el sofá de al lado con sus cosas, como siempre. Nunca cesa. No creo que cenemos, estamos en plan de que no nos entra nada más. En un rato pondremos la serie y ya mañana será otro día.

     Me gustaría terminar igual que ayer, con una frase. A modo de reflexión. Una frase de Robinson Crusoe. Que bien puede aplicarse a hoy. No quiero más que normalidad.

"De tal manera es nuestra condición: no experimentamos las ventajas de un estado hasta que probamos los sinsabores de otros. No conocemos el valor de las cosas hasta que nos vemos privados de ellas - Robinson Crusoe"

miércoles, 8 de abril de 2020

08 de abril de 2020

     Ya han pasado 26 días desde que estamos confinados en casa. ¿Cuántas cosas se pueden hacer en ese tiempo? Muchas. Sobre todo poner la vida de la gente patas arriba.

     Llevo varios días pensando en el blog que hacía en Londres- Las noches dan para mucho. Las mañanas, no tanto. He pasado la última hora buscándolo, y no lo encuentro. Así que me he creado otro, porque cada día cuando me acuesto pienso en escribir. Escribir sin saber muy bien lo que contar, porque básicamente, poco hay que contar. Solo estamos en casa encerrados, sin nada que hacer. Haciendo siempre lo mismo.

    Hasta ahora lo más interesante han sido las series, las películas nuevas y el tiempo con Andrés. Aunque no hacemos nada fuera de lo normal, siento que es especial. Siempre hablamos de las cosas que hemos pasado juntos. Esta es otra más que añadir a la lista. Pero creo que nos está viniendo bien. Sabemos ignorarnos, respetarnos. Sabemos estar juntos. Sabemos amarnos. Hemos aprendido mucho el uno del otro. Y aunque llevamos 8 años juntos, esta situación hace sacar partes nuevas de nosotros que tenemos que saber controlar y respetar el uno del otro. Otra de las partes que más me gustan de esta cuarentena son las video-llamadas. Me da mucha curiosidad que llevando 6 años fuera de casa y estando 6 años lejos de mi familia, siento la necesidad de hablar más con ellos. Creo que es el miedo a todo esto. Pero es genial. Con mamuchi. Con el nenu. Con güelita. Con los padres de Andrés. También está sacando nuestro ingenio.

    Como os digo, las pelis y las series son una de las mejores partes.Siempre queremos ver un montón (con 'nos' me refiero a Andrés y yo), pero al final nunca sacamos tiempo. Si no es por los estudios es porque ponen algo en la tele o por el trabajo o por....excuses, excuses como dicen los british. La parte divertida es decidir si merecen mención en IG o no. Alguna no se lo mereció. Ahora estamos con varias series, una cada uno y una conjunta. Andrés está viendo 'ORZAK', aunque yo estoy con el rabillo y tiene muy buena pinta. Yo estoy con 'VIKINGOS', que como dice mi hermano, es 'la serie'. Aunque esta la empezamos a ver juntos, Andrés perdió el hilo, no le molaba, pero también pone el ojo. Ayer terminé la cuarta temporada. Y la que estamos viendo en conjunto es la última de 'LA CASA DE PAPEL'. Vimos cuatro capítulos. Estamos un poco contrariados con la serie. La temporada anterior la devoramos. Por no hablar de las dos primeras que fueron un bombazo. La tercera, aunque estábamos reticentes por aquello de que las segundas partes nunca fueron buenas, nos gustó. La cuarta no. Para nada. He leído varios comentarios de que es la ostia, que es muy buena, pero de momento no le veo la gracia por ningún sitio después de cuatro capítulos. Quedan otro cuatro. Os mantendré informados de como avanza la cosa.

    El panorama actual deja a Andrés en la mesa, con sus cosas de las velas. Yo en el sofá ignorando la tele mientras escribo, la cocina sin recoger y la ropa tendida.

     Hoy no ha sido el peor día, aunque tengo los ánimos decaídos. La rutina es llevadera, aunque se hace cuesta arriba y me canso de hacer siempre lo mismo. Creo que lo peor es no saber. No saber hacia dónde va esto. Cuando va a terminar. Qué va a pasar luego. Con el curso. Con las prácticas. Las noticias no ayudan. No se sabe ni lo que dicen ni lo que hacen. Creo que ellos tampoco saben lo que hacer. Pero pienso que para nosotros es peor, que sabemos solo lo que quieren que sepamos. Me indigno mucho con la televisión últimamente la verdad. Llena de falsos y cínicos expertos que no tienen ni idea de lo que habla. Ojo, que yo tampoco. Pero yo no salgo en la televisión.

     La sensación de encierro es muy rara. Estar en casa solo me da ganas de comer y de no hacer nada. Pero no hacer nada y comer me llena de remordimientos. Pero sigo comiendo. Ojalá fuera de esas a las que les gusta hacer ejercicio, que puede parar a leer durante 5 horas, de las que cocinan (pero de las que pueden comer y no engordar). Por lo menos estaría entretenida en algo más que quejarme.

     Hoy hice poco. Poco en relación a lo que hice ayer. Ayer cociné, limpié e hice algo de proyecto. Hoy no. Mantenerme con vida ha sido mi sino de hoy. Aunque puse la lavadora, tendí la ropa, recogí la habitación y guardé parte de la ropa de invierno. Hice más cosas de las que creía. Creo que hoy elegí la habitación porque quería estar un poco más sola.

     Creo que voy a seguir leyendo. Ahora que ya me he quitado al espina de escribir. Aunque hoy tengo ganas de hacer deporte. Mientras lo decido os voy a dejar una frase. Del libro. De hoy. Soy muy de frases, para que me vayáis conociendo.

"Lo maravilloso de este planeta, de esta vida, es que hasta el mayor de los horrores, en el infierno, siempre hay hueco para la belleza, siempre florece la esperanza. - La isla de Alice"